SPIRITWALKER

Una película realmente sorprendente.

¡Buenas tardes mis locos asiáticos!

Hace unas semanas se estrenó en los cines españoles una cinta coreana que hace poco he tenido el privilegio de ver. Spiritwalker es un regreso fulgurante al mejor thriller fantástico coreano, ese que nos recuerda a las producciones desarrolladas en los 2000 que nos arrebataron el corazón. Con toques del mejor cine negro, del mejor cine de acción y del mejor cine fantástico, Spiritwalker se erige como una de las sorpresas de este presente año e invita a cualquier tipo de espectador a adentrarse en sus entrañas.

Deambulando entre una historia de mafias y corrupción a la vez que impone ciertos elementos fantásticos inesperados, la película consigue que dicha mezcla se vuelva un cóctel explosivo a la par que muy original. Puede que este año no veamos un thriller con unas ideas tan atrevidas, pero está claro que el riesgo ha dado sus frutos y la propuesta luce de fábula. No esperéis adivinar lo que ocurre hasta estar bien adentrados en su historia pues es difícil anticipar sus movimientos. Spiritwalker es una pequeña joya digna de mención.

Sinopsis: Cada doce horas, un hombre despierta en el cuerpo de una persona distinta, sin saber dónde se encuentra e incapaz de recordar quién era originalmente. Este espíritu errante empieza entonces una búsqueda desesperada de la propia identidad, donde todo le resulta extraño, incluida la misteriosa mujer que afirma reconocerle, y la organización secreta que ha empezado a perseguirlo. ¿Podrá encontrar su propio yo y descubrir la verdad que se esconde tras la constante transferencia de su alma?

Puede que su sinopsis parezca demasiado densa y tediosa como para querer adentrarse en ella cualquier tarde que tengamos libre, pero creedme que no es necesario buscar un momento concreto para ponerse a disfrutar de Spiritwalker. La película se narra de una firma ágil y clara, consiguiendo que su original historia no ensombrezca el devenir de su acción y acontecimientos. Su guión es interesante y no sigue la típica estructura lineal que muchas propuestas del estilo utilizan. Aquí no estamos ante un thriller predecible, sino ante una producción que arriesga en varios aspectos y sale airosa de sus múltiples aventuras. 

Pero, lejos de querer crear un hype desmesurado, y para que todos vosotros podáis llegar a su visionado de una forma medida y controlada, voy a exponer también una cosa que creo que podría haberse rodado de otra forma o si más no haber apostado por continuar su riesgo. Si bien es verdad que estamos ante uno de los mejores inicios del año 2022 en cuanto a dinamismo y acción se refiere, también lo es que su potente introducción acaba diluyéndose con el paso de los minutos. La película va de más a menos, pero cuando llega al clímax de su trama, cumple con creces con todo eso que los coreanos han ido sembrando con los años: realismo incluso en la fantasía.

Nuestro protagonista es un hombre preparado para la batalla, pero sigue siendo humano como tú o como yo, un humano que sangra y padece, y eso es lo que ocurre durante la mayor parte de la película. Kang I-An es un hombre tan aturdido como nosotros, un hombre que va descubriendo su verdadero yo mientras le acompañamos de la mano. Esa evolución y ese propio descubrimiento son lo que hace que su personaje se presente mucho más humano que otros personajes de otras películas. Él no recuerda nada, y cuando digo nada, es que no recuerda ni si quiera como se pelea de forma correcta. Solo su cuerpo sabe reaccionar a aquello que está acostumbrado, como impulsos de memoria que sus nervios recuerdan. Su cuerpo recuerda, su mente no, y no hay nada más interesante que eso para plantearse preguntas sobre quién es realmente.

Las preguntas son constantes y aunque durante la primera media hora iremos igual de perdidos que el alma errante que protagoniza la película, luego se nos dan respuestas de una forma constante y abrumadora. El puzzle se irá reconstruyendo poco a poco y cogerá una forma que le da sentido y razón de ser al guión. No es la típica película que se pierde en su desarrollo y acaba por no saber finiquitarse, sino todo lo contrario, todo queda bien empacado para el espectador. Y no hay mayor alegría que poder decir que todos los otros apartados acompañan de lujo a su carismático prota (o protas) y su historia, pues los efectos especiales y su apartado técnico en general rayan el notable de forma firme y constante. Se nota que la película tiene un presupuesto suficiente para que no quede artificial y poco creíble.

Yoon Jae-Geun puede no ser el director más destacado de la cinematografía coreana, pero tanto su anterior película ("Heartbeat") cómo ésta han sabido cumplir con lo necesario para captar el interés de su público. Así pues, si tenéis ganas de casi dos horas frenéticas delante de vuestro televisor, ésta es una oportunidad perfecta para echarle el ojo a Spiritwalker en cuanto tengáis la oportunidad. Espero que a vosotros os guste tanto como me ha gustado a mí o que al menos paséis un rato agradable frente a ella. Y recordad: nunca olvidéis quién sois realmente.

Conclusión: Estamos ante un thriller fresco e innovador que apuesta por una arriesgada propuesta y un guión complejo que obtiene buenos resultados en su conjunto global. Es verdad que en la segunda mitad de metraje se pierde la sorpresa y pasa a ser una historia de venganza al uso, pero solo por su primera mitad vale la pena hincarle el diente y recordarla durante mucho tiempo. Spiritwalker es una propuesta inteligente y valiente.

TRÁILER DE SPIRITWALKER:

FICHA TÉCNICA DE SPIRITWALKER:

Título original: 유체이탈자 (Spiritwalker)
País: Corea del Sur
Año: 2021
Duración: 108 min.
Director: Yoon Jae-Geun
Guión: Yoon Jae-Geun
Música: Kang Nene
Fotografía: -
Reparto: Yoon Kye-Sang, Lim Ji-Yeon, Park Yong-Woo
Productora: Saram Entertainment / BA Entertainment
Distribuidora: Avio Entertainment / Megabox JoongAng / PlusM
Género: Thriller / Acción / Intriga
Nota: 7'5/10


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¡Hasta pronto y a ver mucho cine asiático!