A MUSE

¡Buenas tardes amantes de lo asiático!

Volvemos al cine coreano para hablar de A muse, una película desgarradora que nos cuenta la relación entre un escritor de éxito y una joven estudiante que crearán un vínculo entre ambos lleno de entresijos y emociones que les cambiará la vida. Una película hecha con ternura y delicadeza que nos tocará la fibra en mucho momentos y en muchos sentidos.

Una obra digna de tener un rincón en nuestra estantería si tenemos la opción de comprarla o de tener un rincón de tiempo en nuestras vidas si podemos verla. Una de esas historias que nos aportan mucho y que nos hacen reflexionar sobre diversos temas que comentaremos a continuación. Pero eso sí, aviso que puede afectar a aquella personas más sensibles, porqué el sentimiento de impotencia se va acrecentando a medida que pasa el metraje.


A MUSE




Lee Jeok-Yo es un hombre de 70 años de edad y también un respetado poeta. Él cuida con cariño de su discípulo de 30 años de edad, Seo Ji-Woo. El mundo de estos dos hombres se agita cuando Han Eun-kyo, una estudiante de secundaria de 17 años de edad entra en escena, ya que su mente y los deseos sexuales se despiertan.

No es una película sexual, ni siquiera erótica, es una especie de obra de arte, como si de un cuadro se tratara, con una fotografía a la altura de películas de gran renombre. La historia se centra sobretodo en el poeta, que ve desde sus ojos todo lo que va ocurriendo y que seguramente es el que más sufre sentimentalmente en la trama. Si no os gusta la angustia sentimental, esta no es vuestra película.




Hay que decir que en un trío amoroso siempre hay quién sufre más, y aunque el final de la película nos deja un regusto de boca extraño ya que no sabemos si acaba bien o mal, después de todo lo visto, pues el mal cuerpo es evidente. Pero antes de ello, habremos vivido junto a nuestros protagonistas situaciones bastante realistas, momentos que cualquiera de nosotros podríamos vivir y con los que nos sentiremos muy identificados.

La empatización con nuestro poeta será total, y en más de un momento nos entrarán ganas de entrar dentro de la película para poner cada cosa en su sitio y que el mismo no sufra y consiga su objetivo. No es que la película tenga un objetivo final ni pueda tener un final cerrado, pero si busca tener una resolución digna que creo que así es.




La figura de la chica es totalmente la clave en este largometraje. Un personaje con carisma, con sensualidad y con mucho juego. Es sin duda uno de los pilares en los que se centra y se apoya la trama y uno de los elementos vitales para que todo funcione y acabe siendo un acierto. El conjunto brilla gracias a ella, y es que el casting acertó de lleno al elegir a esta actriz (Kim Go-Eun), de la que hablaremos luego.

El juego que existe entre los tres se debe a la dualidad que la chica juega en ambos, y es que en ningún momento tendremos claro si la chica solo está jugando o de verdad tiene claras sus intenciones y pretende algo serio. Ese juego será el que nos meta de lleno en los entresijos hablados antes y que nos toque el corazón de manera impactante, causándonos impotencia y angustia en algunos momentos por querer que suceda algo que no vemos que llegue.




No puedo revelaros gran cosa de la trama porqué entonces perdería la gracia, pero os aseguro que si tenéis la paciencia necesaria veréis llegar los frutos de vuestra paciencia. Tiene un ritmo pausado pero no lento y es que la película no puede ir de otra forma porqué sino no funcionaría. Además hay que recalcar el buen papel que lleva a cabo todo el reparto, que hace que toda la historia gane enteros de manera ostensible.

Como decía, la bella actriz que lleva a cabo el papel de la estudiante es Kim Go-Eun, un buen descubrimiento por parte del director, ya que la actriz tenías apenas 20 años a la hora de rodar este largo. Después de A muse pudimos verla en Monster y Coin Locker Girl, a parte de la exitosa y reciente serie coreana Goblin, junto a Gong Yoo. El poeta corre a cargo de Park Hae-Il, un actor reconocido por su papel en The host y Guerra de flechas, entre muchas otras. El tercero en discordia en este trío es el actor Kim Mu-Yeol, el cual acompañó a Hae-Il en Guerra de flechas también.




Del director Jung Ji-Woo, sabemos que empezó su carrera de manera abrumadora con una película llamada Happy End, de 1999, donde contó con la colaboración del gran Choi Min-Sik y la gran actriz Jeon Do-Yeon, además de que próximamente estrenará su nueva película Silent Witness. Un director con experiencia que se toma su tiempo a la hora de sacar y llevar a cabo nuevas ideas. En la pausa está el éxito.

Sin duda A muse gustará a propios y extraños debido a su cotidianidad, a una trama que nos hace empatizar de manera clara y a una buena calidad de producción en todos los sentidos. Un reparto sólido y una fotografía a tener en cuenta crean un conjunto envidiable y que no dejará indiferente a nadie. Espero que os dejéis llevar por esta tempestuosa historia de amor y deseo.




De vosotros depende decidir si el final es el que esperabais o no. Os dejo con el tráiler de esta pequeña obra de arte.


TRÁILER DE A MUSE:





FICHA TÉCNICA DE A MUSE:

Título original: Eun-Gyo (A muse)
País: Corea del Sur
Año: 2012
Duración: 129 min.
Director: Jung Ji-Woo
Reparto: Kim Go-Eun, Park Hae-Il, Kim Mu-Yeol
Género: Drama/Romance
Nota: 9/10


¡Hasta otra y a ver mucho cine asiático!



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