LA INCONSCIENCIA DE LOS CINES

¡Buenas tardes amantes de lo asiático!

Hoy quiero hacer una pequeña reflexión que no solo afecta al cine asiático sino al cine mundial. Una reflexión que creo que es necesaria para que nos demos cuenta de que hay cosas que siguen sin estar bien en este mundo donde la libertad a veces se confunde con el deber. Y esto lo hago desde una posición en la que puedo criticar eso, ya que yo he pasado por esas edades y he visto las películas cuando me tocaba verlas. 

Y diréis, ¿de qué demonios estás hablando ahora? Pues del hecho de encontrarme la hipocresía de la sociedad de hoy y el no reconocer al cine como una herramienta e incluso un arma para cambiar a las personas. Hoy os comentaré mi opinión sobre un tema que se ha pasado tan por encima desde los inicios que ya nadie le hace caso, y sobre el porqué he decidido hablar de ello: la clasificación por edades de las películas.

Hoy no va haber ni crítica ni opinión de ninguna película y es que hay que tratar un tema importante como este. Llevo tiempo deseando hacer un pequeño texto donde exteriorizar mi pensamiento sobre ello, y es que cada vez que entro en una sala de cine siento una incomodidad leve, pero que existe. Y es que, personalmente no me gusta ver a niños en películas que no deberían ver por razones más que obvias y que voy a exponeros aquí. Y quiero dejar claro, que los principales inconscientes aquí son dos: los padres y los cines. 




Una persona joven no es consciente de lo que hace, y ni tan solo la gente adulta a veces sabe lo que hace. Si la calificación por edades existe es por algo, y es para cumplirlo, es una ley escrita a la que nadie hace caso, así que al final ha pasado desapercibida como algo que no existe, y ahí radica el problema. El principal conflicto comienza en los cines, que saben que una película de mayores de 18 años no puede ser vista por menores de edad, y la realidad es que cuando entras dentro de una sala, está lleno de adolescentes. ¿Porqué? Porqué el dinero tira más que la moralidad. Porqué perdonad si soy muy crítico, pero la mayoría de películas de terror y thrillers no son aptos, para nada, para gente joven. Y me da igual lo que vayan a pensar ahora por decir esto, pero pienso eso y seguramente mucha gente lo piensa. ¿Pero que más da, no?

Yo os diré lo que pasa. El cine es un arte muy influyente, igual que lo fueron los libros en su tiempo (incluso ahora) o la música. Se ha demostrado incontables veces que las artes son herramientas que mal utilizadas se vuelven armas, y al final el cine se vuelve un arma con la que mucha gente se acaba autolesionando sin consciencia. Y pensaréis que se me ha ido la cabeza, pero la sociedad se rige por influencias, ideologías y pensamientos que no controlamos y que influyen en nuestro día a día. Y el cine está lleno de todos ellos, está lleno de influencia que nos empapa sin darnos cuenta. 




Luego nos quejamos todos de que el mundo está muy mal, de que algo no funciona y de que la juventud que sube no es como debería ser. Y los primeros que cometemos errores, somos los mayores. Si eres padre, ¿porqué demonios dejas a tu hijo ir a ver algo para mayores de edad? Torturas, sexo, violencia, tiroteos, drogas...¿De verdad creéis que es lo adecuado y que tienen la mentalidad para verlo y procesarlo de manera adecuada? Porqué si es así, estáis muy equivocados. 

He llegado a ver niños de 7-8 años en salas de cine viendo películas como Saw o como Deadpool. Me podéis responder que los dejáis ir a ver dichas películas para concienciarlos y para que aprendan sobre lo que no deben hacer, pero eso me parece pura basura. La mayoría ni siquiera saben ni lo que sus hijos ven. Mis padres nunca me dejaron ir a ver una película para adultos de verdad hasta que tuve 17-18 años, y se lo agradezco sobremanera, porqué he sabido valorar cada cosa a su tiempo y porqué he crecido viendo como las generaciones que venían por detrás no han crecido con los mismos principios en ese aspecto, y es un lastre fuerte.

En segundo lugar, los cines, los cuales dejan entrar a salas de películas para adultos (no me refiero al porno) a los adolescentes, y la de veces que me he tenido que quejar de ello porqué no sabían comportarse al ver algo que no sabían comprender. Diréis que la razón por la que no se comportan es por la educación dada en sus casas, pero lo siento mucho, todo es un cómputo global, y para empezar ya no deberían haber entrado en esa sala. Pero si padres y cines, que son las autoridades máximas para no dejar entrar a esos adolescentes en dichas películas, no actúan, el problema se perpetua infinitamente. 




Una buena multa a los cines a lo mejor les haría cambiar de opinión, y me refiero a una multa digna. Pero el dinero manda, y ese público joven es parte potencial de los ingresos de todos los cines comerciales, así que estamos ante algo que se muerde la cola. Una lástima y un desastre a partes iguales. La solución que yo pido es concienciación a los padres, para que controlen más lo que hacen sus hijos, aunque a veces sea difícil. Y ya no me refiero solo al cine, sino también, por ejemplo, a los videojuegos. Los videojuegos y cualquier otro arte no son dañinos, pero como cualquier otra cosa en esta vida, se ha de usar y consumir con cabeza, y eso proviene de los senos de cada familia.

Dicho esto, no quiero extenderme más, simplemente decir que no estoy de acuerdo en que no se cumpla algo tan sencillo como la clasificación por edades y que por culpa de eso, los adolescentes crezcan con conocimientos y pensamientos que no deberían tener con su edad. Y si no conseguimos que no consuman tales productos, debemos hacer autocrítica e intentar no echar la culpa a la "sociedad" sino a nosotros mismos por permitirlo. El cine es maravilloso, es un arte con el que debemos crecer y es un ejemplo de como crecer como personas, pero todo llega a su tiempo y todo tiene un momento. 

¡Sed conscientes y disfrutad del cine ahora y siempre, con precaución!


Comentarios

Entradas populares