THE BATTLESHIP ISLAND - FUGA O PARIPÉ

¡Buenas tardes amantes de lo asiático!

Acabo por ahora al repaso de este último Festival de Sitges con una coreana que pudo haber sido más. Battleship Island es una experiencia grata pero que no llega a las cotas de calidad a las que Ryoo-Seung-Wan nos tiene acostumbrados. Esta vez nos trae una película bélica sobre parte de la historia de Corea durante la colonización violenta y dictatorial de Japón. 

El director nos trae buenas dosis de cine, pero de forma mucho más light a la que estamos acostumbrados normalmente desde el país coreano, y es que este año la cosecha es floja y no podemos hacer nada para remediarlo. Habrá que esperar unos meses más a que acabe este año y ver si el siguiente está a la altura del anterior.


THE BATTLESHIP ISLAND




Durante la época colonial japonesa, alrededor de 400 personas de Corea, que se vieron obligados a ir a la Isla Acorazado ("Isla Hashima") a extraer carbón, intentan escapar. Ua sinopsis corta y clara que no necesita más explicación, pues la película ocurre toda dentro de esa isla-prisión donde los coreanos fueron tratados como animales y donde fueron esclavizados hasta la muerte.

Sin duda, un tema histórico controvertido y lleno de crítica a una etapa de la historia coreano-japonesa que fue un desastre para ambas naciones. Mucho más para los coreanos, que como decía sufrieron una vejación y una humillación totalmente fuera de control, pero también para los japoneses, los cuales dejaron para los anales de la historia, un hito totalmente vergonzoso y mucho más que reprobable, en una época y un mundo donde no existían los derechos humanos ni la igualdad.




La guerra entre japoneses y coreanos fue una de las más crueles y duras que se han visto nunca, y no debemos quedarnos solo en el conocimiento de las guerras más cercanas, como pueden ser las europeas o las grandes guerras mundiales, ya que la crueldad ha estado presente durante toda la historia y todas las partes del mundo, incluso a día de hoy. Tenemos mucha suerte de vivir en un mundo en el que por suerte no vivimos tantas guerras o por lo menos en una libertad como la que tenemos, porqué sinceramente, viendo películas como ésta, podemos suspirar aliviados y ser más conscientes de todo.

Dicho esto, que creo que era muy necesario y que no está de más comentar, la película está muy bien rodada y dirigida, pero no llega a empatizar nunca con lo que fue este gran conflicto. En ningún momento sentí ninguna conexión con ninguno de los protagonistas, y además nos narra los hechos de forma muy ligera y no demasiado cruel, cuando debería haber sido mucho más dura y desgarradora. Este tipo de producciones muchas veces están ensombrecidas por querer llevarlo a un gran público y a unos cines comerciales que no hacen ningún favor al cine en general. Por culpa de eso, pierden naturalidad y potencia, y es una lástima.




No me gusta ver cuando una película podría haber sido mucho más y se queda a medio camino por meros formalismos. Además la rigurosidad de los hechos queda muy en entredicho, ya que muchas cosas de lo que cuenta son ficción y no representan la verdadera realidad de aquellos hechos. Pero, dejando de banda su falta de rigurosidad y empatización, podemos decir que tiene algunos puntos dignos y valorables como son la fotografía y la ambientación, recreada con estilo y con calidad. Unos elementos que salvan la película, pero que no le dan ni un notable ni un sobresaliente en general.

Además hay que reconocer que el montaje del director es demasiado largo y que incluso la versión normal es demasiado larga. Demasiado metraje para demasiados momentos vacíos y aburridos, ya que hay un bajón de ritmo a media película muy preocupante y al borde de hacernos abandonar el visionado. La acción de los últimos 20 minutos no justifica todo lo demás y ni siquiera es esperada por el espectador, porqué llega un momento que nos da igual y ahí, se produce la desconexión.




De sus actores, puedo decir que hay mucha estrella, mucha calidad y poco aprovechamiento de ello. Es triste ver a un Hwang Jung-Min (The wailing, New world) soso y desubicado, a un Song Joong-Ki (Descendants of the sun) con un personaje poco creíble y sobrante o a una niña (Kim Soo-An -Train to Busan-) que pasa menos penas de las que debieron ser para su edad. Puede que yo buscase demasiada crueldad, pero creo que para una historia así es algo básico y que debe ser.

Me sorprende además que un director como Ryoo Seung-Wan no haya tenido más habilidad a la hora de llevar a cabo esta película, la cual como digo queda muy floja en términos generales. Recordemos que en su haber tiene auténticos peliculones como The berlin File o The unjust, e incluso la divertida Arahan; todas ejemplo del gran director que es. Esta vez, sintiéndolo mucho no puedo darle mucha nota a lo que ha hecho.




Sigo teniendo y manteniendo mucha esperanza en el cine coreano, porqué aunque este no haya sido un gran año, hay que admitir lo evidente, su calidad es máxima y su talento desbordante, así que por favor, esperad unos meses y veréis como vuelven las grandes películas que nos han hecho vibrar todo este tiempo. Porqué Corea es más que cine.


TRÁILER DE THE BATTLESHIP ISLAND:




FICHA TÉCNICA DE THE BATTLESHIP ISLAND:

Título original: The Battleship Island
País: Corea del Sur
Año: 2017
Duración cines: 132 min. / Duración montaje del director: 151 min.
Director: Ryoo Seung-Wan
Reparto: Hwang Jung-Min, Song Joong-Ki, Kim Soo-An, So Ji-Seob
Género: Drama / Acción
Nota: 6/10


¡Hasta pronto y a ver mucho cine asiático!


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