LO MEJOR DE LA ANIMACIÓN (9) - FLAVORS OF YOUTH
¡Buenas tardes amantes de lo asiático!
FLAVORS OF YOUTH
Si por algo brilla con luz propia esta cinta es por saber potenciar cada uno de sus puntos fuertes. El apartado artístico es realmente hipnotizante, creando una conexión entre personaje y público exquisita, haciendo que nos dejemos llevar por el fluir de las imágenes con tanta facilidad que no nos daremos cuenta de lo que tenemos alrededor. Su ritmo es muy acertado, consiguiendo que en cada minuto ocurra algo y que haya siempre algo que ver en pantalla. Y los personajes, qué decir de ellos, pues éstos se mueven naturalmente junto a las historias que nos cuentan, consiguiendo que nos sintamos tan cómodos que no queramos ver acabar nunca ninguna de las tres tramas que se nos exponen.
Y con las historias llegamos a otro punto totalmente excelente, pues cada una de ellas contiene un punto de nostalgia y sensibilidad difícil de describir por su perfección. Nos evocan recuerdos propios, vivencias pasadas y momentos emocionales en cada uno de nosotros, haciendo de esta película algo muy peculiar y a su vez enternecedor. Sin duda, es fácil decir que para cada uno de nosotros esta película tendrá un significado en particular, para así ver cosas únicas. Además, incidirá en nuestro interior de diversas formas, ninguna mejor o peor que otra, sino de maneras muy personales.
Las simples palabras que oímos en la narración de la primera historia, la de los fideos, hace que podamos incluso oler el aroma de los mismos sin ni siquiera tenerlos cerca. Con tan solo la fusión de cuatro adjetivos y nuestra imaginación, las memorias fluirán en nuestro interior como lo hacen en su protagonista. Amor, nostalgia, amistad, dolor...tanto son los sentimientos que podremos encontrar en cada uno de los personajes y situaciones que no podremos dejar de mirar a la pantalla mientras pensamos que posiblemente estén despertando en nosotros las ganas de viajar en el tiempo para revivir cosas que pensábamos ya olvidadas.
Pero estemos atentos para la segunda y tercera historia, pues tanto lo que se nos cuenta del mundo laboral feroz de nuestra modelo venida a menos, como del exigente mundo académico asiático que se vive actualmente, son dos temas tremendamente interesantes. Hay crítica y a su vez desahogo en las formas de explicárnoslo y en ningún momento nos sienta mal o nos hace sentir decaídos. Es la típica crítica social que es tan necesaria que la aceptamos instantáneamente. Nos abren los ojos, y lo hacen con una sutileza desbordante.
Flavors of Youth es una experiencia, es como un día de lluvia, de esos que te dejan en paz y tranquilidad en tu sofá sabiendo que lo mejor que puedes hacer es tomarte la vida como viene, sin problemas ni debilidades, con paz interior. El solo hecho de verla ya es un paso para crecer como personas, para entender un poco más este mundo que a veces se nos escapa entre los dedos como el agua que nos resbala por las manos o el aire que nos roza el cabello. Poesía en imágenes, poesía en palabras. El cine es arte y gracias a proyectos como este eso se hace cada día un poco más patente.
Demos las gracias a tres directores que a partir de ahora han conseguido un hueco inamovible en el interés de cada uno de nosotros y que esperemos que lleven a cabo más obras de este estilo, pues este tipo de historias nunca sobran ni nunca deben faltar. Una primera película que abre las puertas a que nos demuestren que esta película no ha sido un golpe de suerte o un momento de inspiración pasajero, sino algo que desatará su talento en el futuro. Poco más que añadir a una cinta que habla por sí sola y a veces ni necesita palabras para deleitarnos y transportarnos a mundos de total belleza. Viva el cine y viva la animación.
Regreso a la animación para traeros una de las propuestas más enriquecedoras del mes de Agosto en Netflix: Flavors of Youth. Esta cinta de animación es una pequeña joya que nos hará viajar a través de tres historias que nos contarán las vidas de tres protagonistas diferentes en la sociedad China actual. Cargada de buenas intenciones y una bella factura artística, Flavors of Youth es aquello que todos esperamos de una buena película.
Entretenida, ágil y muy corta, esta película no se queda en lo superficial, sino que profundiza en sus temas de una manera poderosa y llena de sentido. Con diversos mensajes tanto evidentes como subliminales, los tres directores que están detrás de la creación de cada uno de los segmentos, nos contarán de una manera sensible los entresijos de la adolescencia y la madurez, entre otras muchas cosas. Puro arte llevado a la pantalla de nuestras casas. Por y para los amantes de la animación.
FLAVORS OF YOUTH
Recuerdos evocados por un cuenco de fideos, el declive de una hermosa modelo y un agridulce primer amor. Tres muestras de historias urbanas en la China actual. Tres muestras de buen cine que nos dejarán con el corazón dividido por cada una de ellas. La sensibilidad es la palabra más adecuada para describir esta película, la cual está llena de grandes elementos para convertirse en un referente de la animación. Todo aquello que buscamos en un largometraje de este estilo está hoy aquí presente: entretenimiento, dulzura y ritmo.
La animación parece estar viviendo una época dorada de nuevo gracias a las constantes producciones que nos llegan desde Japón, pero alguien más se ha apuntado a esta gallina de los huevos de oro, y esa es China. El gigante asiático ha decidido meter mano también en un género que siempre han dominado los nipones, pero esta vez no ha sido solo por méritos propios, sino con la colaboración de los creadores de Your Name, que están presentes en esta cinta...y se nota. Gracias a esta extraña colaboración entre ambos países, Flavors of Youth se convierte en un producto excelente, adquiriendo las virtudes de ambas naciones y combinándolas en un cóctel realmente hermoso. Animación de reflexión adulta muy necesaria.
La animación parece estar viviendo una época dorada de nuevo gracias a las constantes producciones que nos llegan desde Japón, pero alguien más se ha apuntado a esta gallina de los huevos de oro, y esa es China. El gigante asiático ha decidido meter mano también en un género que siempre han dominado los nipones, pero esta vez no ha sido solo por méritos propios, sino con la colaboración de los creadores de Your Name, que están presentes en esta cinta...y se nota. Gracias a esta extraña colaboración entre ambos países, Flavors of Youth se convierte en un producto excelente, adquiriendo las virtudes de ambas naciones y combinándolas en un cóctel realmente hermoso. Animación de reflexión adulta muy necesaria.
Si por algo brilla con luz propia esta cinta es por saber potenciar cada uno de sus puntos fuertes. El apartado artístico es realmente hipnotizante, creando una conexión entre personaje y público exquisita, haciendo que nos dejemos llevar por el fluir de las imágenes con tanta facilidad que no nos daremos cuenta de lo que tenemos alrededor. Su ritmo es muy acertado, consiguiendo que en cada minuto ocurra algo y que haya siempre algo que ver en pantalla. Y los personajes, qué decir de ellos, pues éstos se mueven naturalmente junto a las historias que nos cuentan, consiguiendo que nos sintamos tan cómodos que no queramos ver acabar nunca ninguna de las tres tramas que se nos exponen.
Y con las historias llegamos a otro punto totalmente excelente, pues cada una de ellas contiene un punto de nostalgia y sensibilidad difícil de describir por su perfección. Nos evocan recuerdos propios, vivencias pasadas y momentos emocionales en cada uno de nosotros, haciendo de esta película algo muy peculiar y a su vez enternecedor. Sin duda, es fácil decir que para cada uno de nosotros esta película tendrá un significado en particular, para así ver cosas únicas. Además, incidirá en nuestro interior de diversas formas, ninguna mejor o peor que otra, sino de maneras muy personales.
Las simples palabras que oímos en la narración de la primera historia, la de los fideos, hace que podamos incluso oler el aroma de los mismos sin ni siquiera tenerlos cerca. Con tan solo la fusión de cuatro adjetivos y nuestra imaginación, las memorias fluirán en nuestro interior como lo hacen en su protagonista. Amor, nostalgia, amistad, dolor...tanto son los sentimientos que podremos encontrar en cada uno de los personajes y situaciones que no podremos dejar de mirar a la pantalla mientras pensamos que posiblemente estén despertando en nosotros las ganas de viajar en el tiempo para revivir cosas que pensábamos ya olvidadas.
Pero estemos atentos para la segunda y tercera historia, pues tanto lo que se nos cuenta del mundo laboral feroz de nuestra modelo venida a menos, como del exigente mundo académico asiático que se vive actualmente, son dos temas tremendamente interesantes. Hay crítica y a su vez desahogo en las formas de explicárnoslo y en ningún momento nos sienta mal o nos hace sentir decaídos. Es la típica crítica social que es tan necesaria que la aceptamos instantáneamente. Nos abren los ojos, y lo hacen con una sutileza desbordante.
Flavors of Youth es una experiencia, es como un día de lluvia, de esos que te dejan en paz y tranquilidad en tu sofá sabiendo que lo mejor que puedes hacer es tomarte la vida como viene, sin problemas ni debilidades, con paz interior. El solo hecho de verla ya es un paso para crecer como personas, para entender un poco más este mundo que a veces se nos escapa entre los dedos como el agua que nos resbala por las manos o el aire que nos roza el cabello. Poesía en imágenes, poesía en palabras. El cine es arte y gracias a proyectos como este eso se hace cada día un poco más patente.
Demos las gracias a tres directores que a partir de ahora han conseguido un hueco inamovible en el interés de cada uno de nosotros y que esperemos que lleven a cabo más obras de este estilo, pues este tipo de historias nunca sobran ni nunca deben faltar. Una primera película que abre las puertas a que nos demuestren que esta película no ha sido un golpe de suerte o un momento de inspiración pasajero, sino algo que desatará su talento en el futuro. Poco más que añadir a una cinta que habla por sí sola y a veces ni necesita palabras para deleitarnos y transportarnos a mundos de total belleza. Viva el cine y viva la animación.
Conclusión: Flavors of Youth es una obra llena de momentos realmente interesantes. Es de ritmo ágil, divertido y hasta nostálgico. Todos aquellos que vivimos los noventa nos sentiremos de lo más identificados, pero si algo hay que destacar es el sentimiento puesto en cada escena de esta pqueña joya, pues nos sentiremos parte de ese aroma tan sencillo y a la vez enriquecedor de sus diálogos, planos y expresiones.
TRÁILER DE FLAVORS OF YOUTH:
FICHA TÉCNICA DE FLAVORS OF YOUTH:
Título original: Si shi qing chun (Flavors of Youth)
País: China
Año: 2018
Duración: 74 min.
Director: Haoling Li, Yoshitaka Takeuchi, Yi Xiaoxing
Género: Animación
Nota: 9/10
LO MEJOR DE FLAVORS OF YOUTH:
- Un poso reflexivo excelente.
- Nostálgica y llena de referencias de la década de los noventa.
- Un apartado técnico exquisito y lleno de buen gusto.
- Sencillez en sus formas, siendo esto un punto a favor irreprochable.
- Consigue crear un sentimiento de nostalgia, al hablar sobre la adolescencia, impecable.
- Las tres historia son ágiles, entretenidas y llenas de cosas por ver y analizar.
- Una hora y cuarto que puede ser el mejor tiempo invertido de este año por vosotros.
LO MEJOR DE FLAVORS OF YOUTH:
- Un poso reflexivo excelente.
- Nostálgica y llena de referencias de la década de los noventa.
- Un apartado técnico exquisito y lleno de buen gusto.
- Sencillez en sus formas, siendo esto un punto a favor irreprochable.
- Consigue crear un sentimiento de nostalgia, al hablar sobre la adolescencia, impecable.
- Las tres historia son ágiles, entretenidas y llenas de cosas por ver y analizar.
- Una hora y cuarto que puede ser el mejor tiempo invertido de este año por vosotros.
Twitter: @myasianmadness
¡Hasta pronto y a ver mucho cine asiático!
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